A sus sesenta y dos años, Joaquín Sabina nos sigue transportando con sus exquisitas letras a lugares maravillosos que sólo la poesía puede crear. Joaquín Sabina es cantante y poeta. O para mejor decir: no un cantante metido a poeta, sino un poeta metido a cantante: ¨En tiempos tan oscuros nacen falsos profetas/ y muchas golondrinas huyen de la ciudad/ el asesino sabe más de amor que el poeta/ y el cielo cada vez está más lejos del mar¨. Estos versos hacen parte de la canción llamada ¨Siete crisantemos¨ que está incluida en el álbum titulado ¨Esta boca es mía¨ editado en 1994.
Al lado de su guitarra, Sabina atesoraba voluntad y lecturas de poeta en la Granada universitaria y antifranquista de los años sesenta, y con ellas se fue al exilio londinense para huir de la policía española y encontrarse con la música de Bob Dylan y de los Rolling Stones. Esto le sirvió para escribir su libro de poemas ¨Memorias del exilio¨
Desde 1978 cuando salió a la luz su primer trabajo discográfico llamado ¨Inventario¨ hasta hoy; Sabina ha publicado 19 discos, en los cuales se mezclan temas como el amor, el olvido, la tristeza, las traiciones, la libertad, entre otros. Canciones capaces de emocionar y de definir sentimentalmente la historia de tres generaciones es algo que debe tomarse muy en serio. El arte no consiste en tener buenas ideas, sino en llevarlas a cabo de un modo convincente, y Joaquín Sabina se ha salido muchas veces con la suya, por la capacidad que tiene de convencer con sus historias, sus imágenes y sus palabras.
Sus saberes literarios, sus lecturas de Quevedo y de César Vallejo, le facilitaron los recursos imprescindibles para escribir algunas de las mejores canciones de la segunda mitad del siglo XX: ¨ Los pájaros visitan al psiquiatra/ las estrellas se olvidan de salir/ la muerte viaja en ambulancias blancas/pongamos que hablo de Madrid¨. Esta estrofa hace parte de la canción ¨Pongamos que hablo de Madrid¨ incluida en el álbum ¨Malas compañías¨ editado en 1980.
Con sus canciones, Sabina nos envuelve por completo adentrándonos en los laberintos taciturnos del blues, el tango, el rock y el flamenco. Por medio de su pluma embrujadora logra hacer de temas cotidianos poesías transmutadas en canciones. Es por eso que Joaquín Sabina siempre ha sido uno de mis artistas favoritos; ya que sus letras son poesía pura y no estentóreas proclamas que incitan al sexo ¿o debería decir al "perreo"? En fin, al césar lo que es del césar y como lo dice el maestro en su canción Crisis incluida en su último trabajo discográfico titulado: ¨Vinagre y rosas¨: En el vecindario a la hora del rosario ni carne ni pescao/ dame otra pastilla de Apocalipsis now/ mientras se apolilla el libro rojo de Mao.